Guía sencilla de tipología de maderas para conseguir buenos objetivos de acabados para muebles.
Este planteamiento es muy diferente dependiendo del lugar del mundo donde uno se encuentre, tanto el clima como la vegetación, a la cultura y las tradiciones son valores muy determinantes para responder o hacer una lista. Lo que también es cierto es que en los circuitos sectoriales internacionales están cada vez más globalizados y hablar de roble, oak, eiche, roure, chenê o quercia casi se asocia a una misma tipología estética de madera, aunque existan diferencias por ejemplo entre la madera de roble americano con el roble europeo.
El aspecto visual, tono o color de la madera de roble europeo tiene color en el duramen marrón amarillo claro y la madera de albura un poco más clara. En cambio la madera de roble blanco americano tiene un tono color crema – marrón claro en la albura y marrón desde pálido a más oscuro en el duramen, incluso en ocasiones con tonalidad rosada. Mientras en una misma zona, la madera de roble rojo americano tiene color desde gris claro al rojo pálido en la albura y el duramen tono rosáceo a rojo pálido.
El aspecto visual de la madera de fresno europeo (Faxinus excelsior L.) es blanco rosado madera de albura no se distingue visualmente de la de duramen y son ambas impregnables. En los despieces longitudinales se muestran vetas oscuras y los anillos son perfectamente diferenciables. La madera de fresno tiene excelentes aptitudes para su curvado, siendo apta para raquetas, palos
La madera de fresno es una de las usadas en los muebles de hogar por tener buenas características de resistencia y tolerancia al impacto, además de ofrecer un buen acabado. Es sobre todo usual encontrar la madera de fresno en muebles funcionales como puertas o mobiliario de cocina, ya que han de soportar mucho uso.
Además, la madera de fresno es un excelente combustible y se obtiene un carbón de primera calidad. La raíz de fresno es también muy estimada en ebanistería por las bellas aguas que presenta. Tanto la corteza como las hojas contienen fraxina, de la cual se obtiene un excelente antirreumático.
La madera de pino para muebles, seguramente tiene un largo recorrido en el entorno rural y pobre más allá de lo que nos explica la historia sobre la vida de los ricos. Se dice que: » El mueble en la época medieval es escaso debido a la movilidad de la nobleza, el mueble debe ser por tanto ligero, transportable y desmontable. Pero no me imagino a un agricultor sin la capacidad de coger dos palos y hacerse un asiento para poder realizar mejor su tarea, lo que en ese caso, era madera «de estar por casa» es decir habitual y sin pretensiones luego iba a la hoguera y no a los libros de historia.
La madera de pino es blanda, fácil de manejar, cortar, lijar es económica y puede ser fácilmente tratada.
La madera de cedro, es también blanda y más resistente, es una conífera pinácea que se usa en productos de construcción, como revestimientos, cubiertas, cercas, tejas, cenadores, molduras, cobertizos, puertas, ventanas, persianas, jardineras…comparable con el pino y el abeto. Es ligera y porosa, tiene buena estabilidad, es decir no cambia su tamaño o dimensión a pesar de las condiciones climáticas, de humedad o de temperatura. De entre su tipología, el cedro rojo occidental, o también conocido como cedro de España, es higroscópico y absorberá la humedad que le rodea para alcanzar el justo equilibrio con la atmósfera.
La gran variedad de opciones de la madera para muebles y la producción de estos, está relacionado con su ejecución, si quien la trabaja es un artesano/profesional o una empresa, en el caso que sea una empresa, el condicionamiento a su vez dependerá de costos, maquinaria, logística, competencia, economía empresarial, y desde luego de don-dinero.